Alrededor de 45 cirugías realizadas en los meses julio y agosto, en adolescentes es por apendicitis aguda, así lo reportó la Dra. Lisseth Quispealaya Ascanio Jefa del Departamento de Especialidades Médicas; que refiere que una de las principales causas es la mala alimentación como la ‘papa y el arroz ‘ altos en carbohidratos o alimentos procesados como embutidos.
Desde el servicio de cirugía pediátrica del Hospital “El Carmen” reportaron que «el 70 % de pacientes se opera por cuadro de apendicitis aguda», y la edad que comprende es de la etapa adolescente entre 11 a 14 años. Las camas son ocupadas por pacientes quienes se recuperan de la cirugía realizada por el cirujano pediatra de turno.
Esmeralda García Gutiérrez, madre de una menor que ingresó de emergencia comenta el caso de su hija: “Traje a mi hija porque tenía cólicos por más de 20 días, le pusieron calmantes pero ahora los dolores aumentaron demasiado por eso la traje a emergencia aquí me dijeron que era apendicitis, mi otra hija mayor también se operó a los 12 años de apendicitis, pienso que la causa es por lo que comen en el cafetín pido se haga un control en las escuelas porque tengo mis dos hijos pequeños y no quiero que se operen por apendicitis”.
Los síntomas principales son cuadros de dolor abdominal, vómitos y fiebre. «Cuando estos síntomas están presentes en más de 24 horas, el apéndice se perfora y produce cuadros de peritonitis lo cual agrava el cuadro clínico de estos pacientes, indico la especialista.
Audilia Díaz Garcia, otra madre que sometió a su hija a cirugía menciona que su hija ingreso por emergencia: “El día lunes le traje porque en la escuela le daba cólicos y vómitos y el profesor me dice que le lleve de emergencia porque los síntomas eran de un apéndice, le hicieron exámenes en el hospital y era apéndices por eso la operaron, el médico me dijo que el apéndice aparece por el consumo de comida chatarra y grasas.”
La Dra. Lisseth Quispealaya Ascanio Jefa del Departamento de Especialidades Médicas, recomendó a los padres de familia dar una buena alimentación a sus hijos ricos en frutas y verduras, así como beber por lo menos dos litros de agua diarios.
